Las emociones negativas revelan duda. Si en verdad confiamos en Dios, ¿por qué vamos a estar ansiosos? ¿ Por qué vamos a estar enojados, insatisfechos, envidiosos, deprimidos, amargados y sin esperanza? Sin embargo, todas somos propensos a experimentar estas emociones en algún momento de nuestra vida. Así que no te sientas mal por experimentarlas, pero tampoco vivas con ellas. Niégate a permitir que la fealdad de las emociones negativas estropeen la belleza de la vida que Dios tiene para ti.
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María rivera (viernes, 10 agosto 2018 07:02)
Buenos días pido k Oren por mí