Una rana orgullosa de su talento perdió su vida al abrir su boca. Recuerda que el Señor corona la humildad con bendición. No permitas que tu orgullo o altanería te tiren al
vacío.
Una rana orgullosa de su talento perdió su vida al abrir su boca. Recuerda que el Señor corona la humildad con bendición. No permitas que tu orgullo o altanería te tiren al
vacío.
Esta página web ha sido creada con Jimdo. ¡Regístrate ahora gratis en https://es.jimdo.com!
Escribir comentario